lunes, mayo 16, 2011

No es sólo una caminata diaria

Cada día después del trabajo comienzo con mi caminata diaria, del trabajo a mi casa, hoy tengo la suerte de poder realizar este trayecto caminando y por el centro de Santiago... en el corazón de ésta gran ciudad, donde todas las cosas suceden. He pasado varias aventuras, protestas, marchas, entrega de flyers, peleas, reconciliaciones, llantos, risas, caras alegres y otras no tanto... cada día hay algo nuevo. Una lacrimógena y pacos "custodiando" mi edificio, por un momento pensé que no me dejarían salir, marchas pasando por mi calle e incluso hoy un derrame de ácido sulfúrico en la esquina... hay tantas historias que contar! Pero a veces siento que nada de eso me impresiona mucho, a veces camino con dolor de pies por tener que ir "mas ordenada" al trabajo y a veces quiero solo llegar a hacer nada... hoy es uno de esos días en donde estoy cansada de todo, un poco chata de todo y con ganas de llegar a mi cama ponerme pijama y hacer algo que me guste, como ahora! Que acabo de terminar de comer torta de chocolate (sí de mi cumpleaños) y ahora escribo, veo si hay algo interesante en twitter y en las noticias.
Hoy fue uno de esos días malos, de dolor de pies, de no querer caminar, de solo llegar a la casa, pero cuando iba en Bandera con Compañía o por ahí donde está el museo, había un señor tocando lo que yo creía era una flauta, pero era de tubos de plástico... me llamo tanto la atención que comencé a sonreír sola, creo que me alegro el momento, olvide mi dolor de pies y miré alrededor venía una viejita, una señora muy pelolais y un repartidor de diarios, todos caracterizados en su rol, como una buena obra de teatro... como una buena travesía a casa...